Tenemos dos fechas «señaladas» y consecutivas este mes, San Valentín y el Día de los Solteros y Solteras. La primera fecha es mucho más conocida y anunciada, y la otra podría ser una creación a modo de consuelo, ¿verdad? Hoy hablamos de ello.
De que hablamos...
Amor real: relaciones saludables & cia
El día de San Valentín no es un día inofensivo. ¿Sabías que lo han prohibido en Pakistán? ¿Y que el número de suicidios aumenta en algunos lugares en dicha fecha? Al margen de ello, es un día en el que se celebra el amor, y esto suele asociarse a haber encontrado una media naranja y a hacer regalos. En el marketing se usan mucho estas dos ideas, y se debe tener cuidado con la comunicación porque se están promoviendo, por un lado, las relaciones de dependencia, y por otro, el consumismo.
No queremos parecer ranci@s, que vamos en contra del amor ni mucho menos. El nutricionista Carlos Ríos habla de comida real, así que vamos a basarnos en esta expresión para hablar de amor real. No siempre aparece en las películas, pero es mucho mejor que este sucedáneo que se expone: no necesita de regalos caros, de planes extraordinarios diarios, ni líos de esperar a que la otra persona adivine qué se desea. Se puede celebrar cada día, con un detalle que puede ser simplemente preocuparse por cómo le fue a la otra persona en el trabajo o con ese proyecto en el que anda metida.
El «amor a primera vista«, es ¿AMOR? :S
https://www.youtube.com/watch?v=RfsIR6l8zss
Nuestro llamamiento por el amor real es una defensa manifiesta de las relaciones saludables, en las que hay tres componentes: cada miembro de la pareja por separado, y lo que tienen en común, con la definición que hayan concretado del tipo de relación que quieren tener.
Conservar el espacio privado, aquellos hobbies que se tengan, es importante. También tener en cuenta que, pese a lo que se muestra en películas, canciones… (y publicidad), una pareja pasa por distintas etapas. La del enamoramiento es sólo una de ellas, con su idealización y sus hormonas «revolucionadas». A través de la cultura pueden haberse integrado ciertas concepciones que van en contra de ese amor real que queremos resaltar y conservar. Mejor tener vínculos en los que se acepte que no hay relaciones perfectas, sino personas que se aceptan y que aceptan, y que ponen un esfuerzo consciente al tratar de construir un proyecto de vida juntas.
Hay muchos tipos de amor… ¿y uno «verdadero»?
De forma recurrente se usan las palabras «romántico/a» y «amor», aunque los ejemplos que se dan de parejas varían en tipo y pueden estar exponiéndose comportamientos no saludables.
Se puede usar el mismo lenguaje para referirse a cosas diferentes. Por eso, hay que elegir bien las palabras a la hora de comunicar. ¿Qué entenderán quienes me lean? ¿Qué se está promoviendo?
Nos gusta la clasificación de relaciones que hace Sternberg, según el grado en el que se hallen la pasión, la intimidad y el compromiso. De esta forma, distingue la siguiente tipología:

All you need is love…!
Amor, no necesariamente una pareja. Estar o no con alguien es una elección, y como tal, debe ser respetada y considerada respetable.
¿Una elección? Sí, porque el enamoramiento es «fácil», es dejarse llevar por las hormonas y por esa idealización de la otra persona. Con el tiempo, el «tema» va evolucionando, se va viendo con mayor claridad. Descubrimos que quien pensábamos que era perfecto/a, sólo es humano. Y justo eso es lo que, al margen de lo que se expone en algunos anuncios publicitarios, películas, canciones y demás producciones culturales, añade valor. El amor es una decisión.
Estar soltero o soltera es otra decisión. Por eso, celebremos el amor, incluyendo el amor por un@ mism@, sin confundirlo con el egoísmo. Celebremos el amor, que no significa celebrar San Valentín.
En comunicación y publicidad tenemos un reto añadido quienes nos dedicamos a ello siguiendo unos valores de responsabilidad social. Llegar a las personas, conectar con ellas, mientras que no recurrimos a ciertos estereotipos y a los mitos del amor romántico.
Raquel Gil
Community manager y redacción