En tu casa no falta el típico mapa para rascar los lugares en los que has estado. Dices amar el planeta y tener espíritu wanderlust, y no imaginas un futuro sin viajes. ¿Practicas ya el turismo sostenible?
De que hablamos...
Sostenibilidad: un valor en alza
En el entorno en el que nos movemos, se habla mucho de triple balance, de criterios ambientales, de huella medioambiental, economía circular… son conceptos que marcan objetivos compartidos por un buen número de empresas, que sigue creciendo. Desde la ONU se busca acelerar lo que ya parece imparable, y se insta a las organizaciones a comprometerse en serio con los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) y a embarcarse en iniciativas más ambiciosas para ir más rápido.
¿Qué ocurre cuando no se trabaja en medio ambiente? ¡Es imposible mantenerse al margen de la corriente! Si somos personas observadoras, habremos visto en más de una ocasión que productos que compramos llevan lo que se conoce como etiquetado ecológico, y que es garantía de que el producto en cuestión está respetando una serie de criterios y cumple unas garantías de protección medioambiental. Lo bio, orgánico, ecológico… aparece no sólo en el packaging de ciertos productos como reclamo, sino que si somos foodies seguro que lo habremos encontrado citado en las recetas de nuestros cocineros/as favoritos/as o de nutricionistas.
Quien consume influye en las empresas, y estas influyen a su vez en consumidoras/es menos concienciadas/os. De este modo, la sostenibilidad no para de crecer.
Trucos para reducir la huella ambiental al viajar
Quizás en el sector turismo no se piensa tanto en sostenibilidad. Y decimos “quizás”, porque van surgiendo alternativas al turismo tradicional. También sucede que muchas personas se van desligando del concepto “turista”, al considerar que influye -negativamente- en el medio en el que disfruta de sus vacaciones.
Os dejamos con los diez mandamientos del turismo sostenible.
1. Si está de moda o va mucha gente, desconfía
Hay lugares a los que va tanta gente que se pone en peligro el ecosistema. Por otra parte, hay actividades en la naturaleza enfocadas a grupos numerosos, y que sean en la naturaleza no significa que sean adecuadas para la naturaleza. Piensa en las visitas masivas a ver como las tortugas marinas ponen sus huevos, o el estrés que pueden llegar a vivir las rayas. Si quieres adentrarte más en el tema, aquí tienes un estudio sobre el caso concreto de las Islas Galápagos. ¡Mejor ir fuera de temporada o buscar otros lugares!
2. Los documentos de viaje, mejor en el móvil
No imprimas los billetes de avión, o la confirmación del alojamiento, los billetes de tren, etc. ¡No es necesario! Te será mucho más cómodo, por otro lado, tenerlo todo en el móvil. ¡Y ahorrarás papel y no consumirás tinta! Un detalle que hace que tu viaje tenga más “papeletas” de poder ser llamado turismo sostenible.
3. Alojamiento sostenible
Busca alojamiento compartido, o si no, hoteles verdes que tengan en cuenta la sostenibilidad como objetivo y la busquen mediante iniciativas como el reciclaje o el uso de productos ecológicos. Haz que sea aún más sostenible cumpliendo el punto 4 😉
4. Ahorra energía allá donde estés
“Si el precio no cambia poniendo más o menos el aire acondicionado“. Advierte que hay otro tipo de precio, el coste medioambiental. Pon el aire lo justo y necesario, no bajes la temperatura más de lo recomendado, y busca formas de que la casa o la habitación de hotel u hostal esté fresca sin necesidad de recurrir a climatización.
5. No tengas prisa por llegar
La bicicleta es un buen tipo de transporte para quien quiere hacer turismo sostenible ¡Nos permite integrarnos más con el ambiente! Descansa en ese sitio que acabas de encontrar por casualidad, toma fotografías, habla con los/as lugareños… y, viéndolo de otra forma, estás cuidando tu salud.
¿Demasiada distancia como para hacerla andando o en bici? Prima siempre el transporte público. De nuevo, busca conectar con la parte más auténtica del lugar que visitas.
6. Si vas en coche, que sea compartido.
Vale, no nos ponemos exquisit@s, puede que no haya manera de ir en bici, en bus o en tren. Conexiones malas, horarios imposibles…
Si decides ir en coche, hay formas de reducir su impacto medioambiental. Busca otras personas que estén interesadas en realizar el mismo trayecto, y comparte coche. ¡Compartir es vivir!
7. Degusta alimentos locales
¡Ay la comodidad de las conocidas franquicias! Aléjate de la zona de confort, e investiga mercadillos con la comida puesta en cajas para luego cocinar en el alojamiento. Ve a restaurantes de comida local, y tendrás una seguridad mayor de que lo que haces es consumo de proximidad.
Si has llevado comida de casa, o eres de alimentarte a base de supermercado, es una buena inversión comprar cubiertos reutilizables, en lugar de llevar los típicos de usar y tirar de plástico. Y, profundizando más en el tema del supermercado, nuestros principios respecto al medio ambiente no se van de vacaciones: evita el packaging que abusa de plástico.
8. Economiza el agua
Puede que en tu destino te sientas en la obligación de comprar botellas de agua por estar todo el día fuera del sitio en el que te alojes, o porque no quieras tomar agua del grifo. Si se queda caliente, úsala para lavarte las manos, regar, o guárdala para después meterla en el frigorífico -si tienes-. No te olvides de reciclar, busca el contenedor correspondiente a la hora de deshacerte de las botellas gastadas. ¡El turismo sostenible empieza en pequeños gestos como estos!
9. Cuida flora y fauna
¿Una salida campestre? ¿Visita a un jardín? No deteriores el medio, recuerda llevar siempre bolsa para los desperdicios y no molestes a la fauna local. Aunque haya animales acostumbrados a la presencia humana, los ruidos pueden generarles estrés.
10. No caigas en el voluntariado de postureo
Si haces voluntariado, serás el perfecto o la perfecta turista sostenible, al contribuir aún más al desarrollo local y al medio ambiente.
Si es por postureo y no por convicción, no sabemos que hacías leyendo esta lista. Snif, snif.
Esperamos que te ayuden estos pequeños tips para practicar turismo sostenible.
¿Tienes una empresa y quieres mayor sostenibilidad en todo lo relativo a la comunicación?
¿Te dedicas al turismo sostenible y quieres darte a conocer?
Sea cual sea tu caso, estamos aquí. ¿Hablamos?