Quizás nos suene el origen de los nombres de las empresas más famosas, como McDonalds, Ford, o Zara. Pero, ¿qué ocurre con otras marcas green? Hoy rescatamos del posible olvido las historias de algunas que llaman la atención y que merece la pena resaltar.
De que hablamos...
Ecosia
Es un buscador que no quiere ponerle las cosas fáciles a Google. Fundado en 2009, por un empresario alemán, su propósito es cambiar el mundo, haciendo frente a la deforestación a golpe de click. Concretamente, de los nuestros, puesto que cada búsqueda supone que se plante un nuevo árbol.
En un primer momento se llamó Forestle, y en 2014 adoptaría el nombre actual. Su origen está en un viaje mochila al hombro por Asia y América del Sur. La idea se le “apareció” a Christian Kroll estando en Nepal.
Ecoalf
Nos encandilan con sus diseños actuales y minimalistas, enfocados a lo práctico. No siguen modas, puesto que son prendas de ropa y complementos atemporales. Ell@s CREAN moda, a base de sostenibilidad e innovación.
La historia detrás de la marca es una historia de superación. Javier Goyeneche vio caer su querida Fun&Basics, pero ahora está al frente de Ecoalf, un negocio que parece imparable, como la tendencia de las empresas de ocuparse del medio ambiente dentro de su propia estrategia.
¿Y por qué ese nombre? El ECO lo podemos suponer, pero… ¿y el ALF? Se trata de las primeras letras del nombre de su hijo. Alfredo puede presumir de haber “ayudado” a su padre en esta aventura de emprender montando una marca green.
Lush
Otra de las marcas green que nos incita a cuidarnos mientras protegemos el medio ambiente. ¿Y cómo? Nos invita a emplear productos frescos, hechos con materiales naturales.
De hecho, puede que ahora os paréis a pensar en el nombre de la marca. Los significados que tiene la palabra “lush” parecen haber sido instaurados como emblema de sus productos. Como adjetivo, la palabra lush significa: lozano, exhuberante, lujoso, exquisito… Un nombre que encaja con su branding, el objetivo de cada producto, el característico trato que se da a clientes y clientas en las tiendas, o la decoración que identifica a las mismas.
Natura
Mientras otras tiendas parecían gritar “¡Compren, compren!”, Natura conseguía visitas sin necesidad de llamarnos -ya lo hacía un enorme oso pardo colocado a la entrada-. ¡Cuidado! No caigamos en el error de pensar que el origen de Natura fue una tienda pequeña con un oso grande custodiando la entrada. ¡Los auténticos comienzos fueron otros! El fundador de Natura -Sergio Durany-, su mujer y un amigo, iniciaron un taller de latas. Compraban latas por un duro, y las transformaban en objetos curiosos.
Ya no hay osos en estas tiendas, pero su elogio a la tranquilidad, a la paz, a la búsqueda de sensaciones confortantes… se mantiene. En 1992 habían abierto en Barcelona su primera tienda, y en su web, nos confirman algo que era evidente: “hemos apostado siempre por una política de desarrollo lenta, pero segura”. Podríamos decir que es pionera en lo de la sostenibilidad y el triple balance, al buscar beneficios sociales y medioambientales, sin dejar de lado el propio crecimiento económico de la empresa. Desde nada menos que 1994 llevan apoyando más de 70 proyectos. ¡Chúpate esa Greenwashing! Aquí tenemos un ejemplo de que no hace falta hacer ruido para consolidarse, y de que el interés por el medio ambiente no es algo nuevo. ¡Sólo debemos juntarnos y organizarnos! 😉
Xinca
Xinca no es solo una etnia amerindia, situada entre lo que es hoy Guatemala y El Salvador, también es una marca green de zapatillas.
Los fundadores de Xinca dicen que están orgullosos de que las zapatillas que fabrican estén hechas de basura, y es que han conseguido un calzado de calidad, siguiendo el modelo de economía circular, y siendo sostenibles en otros sentidos al integrar la perspectiva social y servir para la integración social.
El nacimiento de la marca está en un programa de televisión -para que luego le digan caja tonta…-. Fue 2013 el año en el que un reality show emitido por Telefe, “El Emprendedor del Millón”, llevó a 3 amigos de Mendoza a conseguir el dinero necesario para fundar esta empresa.
Frente a las compras compulsivas, y la producción al margen de los ritmos de la naturaleza, estas marcas green defienden otro sistema.
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