Desde que arrancamos Verdes Digitales en 2015 hemos tenido la suerte de trabajar en decenas de proyectos europeos (LIFE, Horizonte 2020, interreg, erasmus plus, etc.) con acciones de comunicación y marketing digital de todo tipo (estrategia, redes sociales, publicidad, diseño, desarrollo web, eventos, etc.)
De todas las acciones que hemos desarrollado, es el branding (imagen de marca o corporativa), con la acción que mas hemos participado, trabajando en ofrecer una propuesta creativa diferente. Hablando con nuestro equipo de diseñadoras gráficas hemos identificado algunos puntos clave que tiene que tener una imagen de marca potente de proyectos europeos:
De que hablamos...
Primero: escuchar al cliente.
En los proyectos de diseño gráfico, especialmente en los de imagen de marca, desde Verdes Digitales trabajamos lo primero en un brief (o cuestionario) con preguntas clave para entender bien qué se quiere transmitir, objetivos, públicos, etc. y con ello podemos empezar a trabajar en una segunda fase de investigación. Este punto en los proyectos europeos suele ser algo más complejo que con otros proyectos de empresa, ya que suele haber varios socios/as repartidos por la geografía española y europea que tiene voto y decisión en el proceso, generando tomas de decisión más largas y con más matices.
Al igual que escuchamos a los socios/as del proyecto, tenemos que escuchar a las diferentes audiencias a las que se dirigirá el mismo una vez lanzado, y esta suele ser también muy amplia, por lo que el diseño deberá ser accesible y atractivo para entornos muy técnicos (universidades, empresas, centros de investigación, etc.) y generales (ciudadanía).
Segundo: Investigar a fondo
Muchos de los proyectos en los que trabajamos vienen de ser la continuación de otros anteriores, por lo que debemos ver qué se ha hecho anteriormente y trabajar en una idea de marca continuista. Este trabajo de investigación es, seguramente, el punto más importante, ya que buscaremos referencias de interés, puntos rojos a los que no querremos parecernos, etc. En este proceso debemos tener en cuenta también que podemos salirnos del status quo de lo que se «suele llevar» en proyectos ambientales/sociales, y darle un toque más contemporáneo, moderno y diferencial.
Tercero: iconografiar
Así describe nuestra diseñadora Marta Chicote la forma en la que hay que plantear la mayoría de proyectos, en los que es una especie (osos, garcetas, cetáceos, rebollos, etc.) o un contexto (costas, montañas, bosques, corales, etc.), o incluso la unión de ambos, lo que hay que representar de forma clara y entendible para todo el mundo (al menos el europeo).
Marta nos comenta, que normalmente los socios/as tiene muy claro qué quieren representar pero que eso implica un reto grande a la hora de simplificar cosas concretas y con muchos matices en iconos simples que puedan ser realmente adaptables y entendibles en entornos digitales y físicos.
Cuarto: personalidad única
Aquí hablamos de darle una personalidad única, apostar por algo realmente diferente, que se salga del mundo corporativo, menos fría, menos plana. El diseño debe ser una baza importante en la comunicación del proyecto, y eso depende mucho de cómo se haya trabajado y como «nos hayamos arriesgado» respecto a lo que normalmente se hace. El mundo ambiental/social, y en concreto en los proyectos europeos, el «juego» que nos dan con el brief es muy potente, por lo que realmente se pueden hacer cosas muy enriquecedoras e innovadoras dentro del clásico branding. ¿A quién no le gustaría hacer el branding de un proyecto europeo de conservación de osos frente al cambio climático?
En Verdes Digitales llevamos trabajando desde hace más de 7 años en proyectos de diseño gráfico para todo tipo de entidades (empresas, ONGs, instituciones, etc.), con el foco en la innovación de un sector ambiental/social que realmente puede aportar con su imagen grandes avances en la comunicación de sus proyectos.
