El teatro es una herramienta muy poderosa. Solemos percibirlo como un entretenimiento más, pero el teatro social puede ser transformador.
Participar en una obra teatral, ya sea como actores y actrices o como público, puede servirnos para entender otras realidades y vivencias, ayudarnos a superar duelos, permitirnos reflexionar de forma crítica, facilitarnos la comprensión de lo que sucede a nuestro alrededor… El teatro, además, educa y transmite valores.
De que hablamos...
El papel transformador del teatro social
Con esta vertiente teatral se da protagonismo a las personas y sus experiencias. Con él alcanzamos un aprendizaje mutuo que permita también cambiar la realidad. Así, el teatro es una técnica muy empleada para la resolución de conflictos. La razón es que promueve el trabajo en equipo, el diálogo, la solidaridad, las habilidades sociales, la autoconfianza, la creación de vínculos interpersonales, etc. Además, es el arte que reúne mayores formas artísticas de expresión: no solo la corporal, oral y escrita; también se emplean la danza, la plástica y la música.
En el sector del trabajo social se utiliza muy a menudo el teatro como parte de sus intervenciones. Es una herramienta muy útil porque permite mezclar lo lúdico con lo didáctico. A través de ella conseguimos conocernos a nosotros/as mismos/as, a quienes nos rodean y a nuestro entorno, para así transformarlo a mejor.
Con el teatro social se pueden transmitir también valores medioambientales y hacer que lleguen mejor al público. A continuación, os dejamos algunos ejemplos de proyectos teatrales que, en su fondo o en su forma, conjugan muy bien valores sociales y medioambientales:
Les Luthiers y sus instrumentos informales
El propio nombre del grupo ya alude a la creación y fabricación de instrumentos. Les Luthiers van más allá del humor: también se dedican a la «instrumentología». Los artefactos musicales se clasifican entre los que parodian a otros ya conocidos, los que producen timbres insólitos y los que se basan en objetos cotidianos. ¿La clave? La creatividad para echar mano de materiales reciclados y hacerlos sonar.
Proyecto social La música del reciclaje
Es una iniciativa de Ecoembes que tiene como meta formar musicalmente a menores en riesgo de exclusión social. Los chicos y chicas construyen sus propios instrumentos utilizando materiales reciclados. Además de educarles en valores y ayudarles a superarse, se les transmite la importancia del reciclaje.
STOMP, teatro musical
Este grupo fue pionero en los espectáculos basados en el reciclaje y la percusión —sí, son anteriores a Mayumana—. Llevan más de 25 años recorriendo el mundo con sus shows musicales que aúnan música, danza, y teatro al ritmo que marcan instrumentos elaborados con desechos urbanos.
La Rueda, teatro social
Esta compañía quiere romper con la típica relación del teatro con el público y la sociedad. Para ello usa herramientas de intervención artística y social como el Teatro Foro, el Teatro Encuentro o el Teatro Comunitario. La Rueda busca que los/as espectadores reflexionen de forma colectiva sobre las temáticas sociales que presentan sobre el escenario. El objetivo es la transformación de esas realidades.
«Historia de una semilla», de La Maquiné
La compañía andaluza reúne proyecciones, títeres y música en directo en una representación que ha merecido el Premio Lorca 2018 al Mejor espectáculo para la infancia. La historia narra la vida de una semilla y sus dificultades para crecer y convertirse en un árbol. De esta forma tan poética se transmite a niños y niñas la necesidad de cuidar el medio ambiente.
¿Se os ocurren más espectáculos de teatro o danza relacionados con temáticas sociales o medioambientales? Ya hemos hablado sobre películas y series, pero seguro que hay muchos más productos verdes y culturales que merecen la pena. ¡Somos todo oídos!
